Es importante que leas atentamente este documento donde reflejamos la idiosincrasia de
nuestra forma de viajar.
Todos somos conscientes de que un viaje de aventura requiere ciertos mínimos de tolerancia y
resistencia ante la queja. Visitaremos lugares más allá de los viajes convencionales, donde es
difícil llegar y las infraestructuras pueden ser precarias o poco parecidas a lo que encontramos
por Europa u occidente. Esta es la gracia de estos viajes el poder llegar donde pocos llegan. Por
tanto puede que nos encontremos en situaciones como:

Controles policiales que templen nuestra paciencia y retrasen nuestro viaje
Carreteras cortadas o desvíos infernales
Puede que nos saltemos alguna de las comidas
Podría darse el caso de que tengas que dormir en una cama con otra persona
Que las inclemencias climáticas sean exageradas
Que nos quedemos sin luz o energía eléctrica
Que la cerveza no este fría
Que un compañero de viaje no te caiga bien
Que el coche se nos rompa en el momento más inoportuno
Que debamos cuidar de un compañero
Que el guía se pierda
Que no sigamos al pie de la letra el guion del viaje
Que no tengamos cobertura, ni internet. Ohh dios mío!
Que nos roben o sustraigan algún enser
Que pillemos una diarrea, estreñimiento o nos pongamos enfermos
Os presento las múltiples hipótesis que nos puede suceder y algunas otras que no
contemplamos en este texto. Pero lo más probable es que no suceda ninguna de estas
situaciones.

Ahora viene la pregunta y que debes responder con un SI o con un NO rotundamente.
SABES DONDE VAS? …………
Sí crees que puedes superar cualquiera de estas situaciones u otras sin problema. Eres apto
para viajar con nosotros.
Por Antonio Robledo ZAPA